viernes, 19 de noviembre de 2010

EL SABADO ES EL MISMO DIA DE AYER Y DE HOY


EL SÁBADO ES EL MISMO DÍA DE AYER Y DE HOY
Entre los diez mandamientos que Dios entregó a Moisés, estaba el sábado. Dios ordena a todos los seres humanos a observar y descansar en el séptimo día. Este mandamiento es el sello de Dios, en el derramo todo su amor por la creación hecha. El desobedecer este mandato es ignorar la voluntad de Dios y transgresión de su ley que es vigente hasta el fin del tiempo.
Muchos que se dicen ser cristianos argumentan diferentes cosas en cuanto al sábado. Unos dicen que fue abolido. Otros dicen que era solo para los judíos. Otro grupo dice que Jesús los clavó en la cruz, y el más popular que ahora está agarrando fuerzas, dicen que el sábado fue cambiado por el domingo. En este tema, usted podrá ver que estos argumentos no tienen nada de verdad y que por lo tanto el sábado sigue siendo el verdadero día del Señor.
No penséis que he venido para abrogar la ley o los profetas; no he venido para abrogar, sino para cumplir.
Mateo 5:17
El origen del sábado fue establecido en la misma creación cuando Dios hizo los cielos y la tierra:
Génesis 2:2-3 Y acabó Dios en el día séptimo su obra que hizo, y reposó el día séptimo de toda su obra que había hecho. Y bendijo Dios al día séptimo, y santificó, porque en él reposó de toda su obra que había hecho.
Dios mismo santificó el sábado. La palabra “santificar” quiere decir poner a parte para uso sagrado. O sea, que el sábado fue hecho para un uso especial que era sagrado. El problema que usted va a encontrar es que Dios literalmente hizo nada especial en ese día, ni tampoco ninguna creación. Esto claramente indica que los que iban a usar el sábado para uso sagrado iban a ser los habitantes de la tierra y no él. Vayamos al Sinaí, cuando por primera vez Dios, puso el sábado por escrito:
Éxodo 20:8-9 Acordarte has del día Sábado, para santificarlo.
Seis días trabajarás, y harás toda tu obra; Mas el séptimo día será reposo para Jehová tu Dios: no hagas en él obra alguna, tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu siervo, ni tu criada, ni tu bestia, ni tu extranjero que está dentro de tus puertas: Porque en seis días hizo Jehová los cielos y la tierra, la mar y todas las cosas que en ellos hay, y reposó en el séptimo día: por tanto Jehová bendijo el día del reposo y lo santificó.
La primera parte del mandamiento dice “acordarte” puesto que Jehová ya lo había dicho antes. Esto ya lo pudimos comprobar en Génesis y también usted lo puede ver en Éxodo 16:29-30 que es antes de los diez mandamientos del capitulo 20. Note que al final del mandamiento Dios hace referencia nuevamente al Génesis. Esto nos da a entender que cuando la palabra dice “acordarte” es porque Dios está pensando en la creación.
La segunda parte del mandamiento es la que indica quines son los que van a utilizar el sábado para uso sagrado. Dios le está dejando saber a los humanos que ellos deben dedicar el sábado únicamente a Dios. Es obvio que el mandamiento no es para Dios puesto que Dios no tiene a quien adorar; solo nosotros que fuimos creados. Con todo esto, Dios se abstuvo de hacer creación alguna en el día santificado por él para así darnos ejemplo.
La palabra de Dios indica que en el día santo no se puede hacer negocios ni nada personal que sea para beneficio o satisfacción propia:
Isaías 58:13 Si retrajeres del sábado tu pie, de hacer tu voluntad en mi día santo, y al sábado llamares delicias, santo, glorioso de Jehová; y lo venerares, no haciendo tus caminos, ni buscando tu voluntad, ni hablando tus palabras: Entonces te deleitarás en Jehová…

Este texto indica que no se puede hacer nuestra propia voluntad en el día de reposo. Un ejemplo de hacer nuestra propia voluntad es ir a la playa para bañarnos y pasar un buen tiempo. En el mismo caso, si vamos a la playa para bautizar a alguien, entonces esa si es la voluntad de Dios, siempre y cuando salgamos de la playa tan pronto la obra del Señor ya esté hecha.
Al igual que los fariseos de la época de Jesús, los cristianos de hoy acusan a Jesús de haber violado el sábado. Esto es mentira. El perfecto ejemplo de cómo guardar el sábado fue hecho por Jesús. La profesión de Jesús era la carpintería y Jesús nunca hizo carpintería en sábado puesto que el mandamiento lo prohibía. El Señor nunca transgredió el mandamiento de Dios, sino que lo vino a restituir a su verdadero propósito por la cual fue hecho. El noventa y cinco por ciento de los milagros que la Biblia nos cuenta que Jesús hizo fueron hechos en sábados. ¿Sabe usted por qué? Porque el Sábado es para Dios tal y como lo especifica el mandamiento y no como lo hacían los fariseos hipócritas y los cristianos modernos de hoy.
Aunque Jesús hubiese querido no obedecer el sábado, él si lo hubiese podido hacer puesto que fue él quien hizo el sábado en la creación y ese es su día para nosotros adorarle. Pero tal y como en la creación, Jesús nuevamente volvió a dar ejemplo de cómo obedecerlo.
Juan 1:1-3 EN el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Este era en el principio con Dios. Todas las cosas por él fueron hechas; y sin él nada de lo que es hecho, fué hecho.
Jesús es el verbo y fue él quien hizo todas las cosas incluyendo el sábado.
Marcos 2:27-28 También les dijo: El sábado por causa del hombre es hecho; no el hombre por causa del sábado. Así que el Hijo del hombre es Señor aun del sábado.
Los fariseos hipócritas de la época de Jesús se inventaron que si alguien está enfermo y es sábado, el enfermo no podía ser ayudado. Jesús les llamó hipócritas porque lo hacían para no gastar su dinero ni su tiempo. El sábado fue precisamente para hacer la obra de Dios, y la principal era ayudar a los enfermos.
Marcos 2:27-28 También les dijo: El sábado por causa del hombre es hecho.
“El Sábado fue hecho por causa del hombre”; en otras palabras, por causa del género humano. Él no dijo que para los hebreos solamente, ni tampoco dijo para los judíos, el dijo simplemente “por causa del hombre”. Le invito a que lea Isaías 56:2-6 donde la palabra de Jehová indica claramente que el sábado es para todas las naciones.
La idea de que el sábado era solamente para los judíos es absurda puesto que en la creación no existía la nación judía; no existía ni un solo judío cuando Dios hizo los cielos y la tierra. El simple hecho de que el pueblo hebreo haya recibido los diez mandamientos no quiere decir que solamente era para ellos. Alguien debía recibir los mandamientos y protegerlos. Y la única nación apta para hacer esta obra, puesto que a Jehová le complació así, fue la hebrea, la descendencia de Jacob.
Un argumento que muchos alegan entre los cristianos para no guardar el día de reposo es que el día de reposo fue abolido cuando Jesús murió en la cruz. Primeramente, ¿Dónde dice la Biblia que el cuarto mandamiento fue abolido en la cruz? En ninguna parte de la Biblia se encuentra tal escritura.
Simplemente podemos encontrar textos que son malinterpretados. Veamos uno de ellos:
Colosenses 2:14-16 Rayendo la cédula de los ritos que nos era contraria, que era contra nosotros, quitándola de en medio y enclavándola en la cruz; Y despojando los principados y las potestades, sacólos á la vergüenza en público, triunfando de ellos en sí mismo. Por tanto, nadie os juzgue en comida, ó en bebida, ó en parte de día de fiesta, ó de nueva luna, ó de sábados. Lo cual es la sombra de lo por venir; mas el cuerpo es de Cristo.
Este texto no está hablando de las tablas de piedra donde Dios escribió la ley, sino del libro de la ley que Moisés escribió y que muy pocos cristianos conocen. Los únicos mandamientos que fueron abolidos fueron aquellos que eran sombra o símbolo del Mesías tal y como lo especifica el versículo 17. Estos mandamientos que también incluían sábados, pero que simbólicos del Mesías, estaban escritos en el libro de la ley.

Otros cristianos dicen que el sábado fue cambiado por el domingo puesto que Jesús resucitó en ese día. Esta creencia es un error fatal. Si Jesús hubiese cambiado el día de reposo lo hubiera dicho en las escritura. Sin embargo él nunca lo dijo. Al contrario la Biblia indica que Dios nunca habló ni hablará de otro día, lea Hebreos 4:4-8, en especial el 8.
Otro detalle que muestra que Jesús nunca cambió el sábado por el domingo es que antes de él partir al cielo, le dijo a sus discípulos que cuando venga la destrucción de Jerusalén, su huida no sea ni en invierno ni en sábado. Si Jesús hubiera cambiado el día, hubiera dicho domingo puesto que la destrucción de Jerusalén fue 40 años después que Jesús se fue al cielo:
Mateo 24:20 Orad, pues, que vuestra huída no sea en invierno ni en sábado;
La palabra de Dios indica que cuando esta tierra sea restaurada y los cielos sean hechos nuevos, el sábado será el día en que iremos a adorar a Dios en su misma presencia. Será el día más alegre y de más gloria de toda la semana:
Isaías 66:22-23 Porque como los cielos nuevos y la nueva tierra, que yo hago, permanecen delante de mí, dice Jehová, así permanecerá vuestra simiente y vuestro nombre. Y será que de mes en mes, y de sábado en sábado, vendrá toda carne á adorar delante de mí, dijo Jehová.
Satanás sabe que si los cristianos violan aunque sea un solo mandamiento de la ley de Dios, el sábado, entonces se hacen culpables de todos y no pueden entrar al reino de los cielos puesto que son hechos transgresores de la ley y por ende pecadores sin salvación:
Santiago 2:10 Porque cualquiera que hubiere guardado toda la ley, y ofendiere en un punto, es hecho culpado de todos.
El sábado fue parte del plan original de Dios para la humanidad. Es decir, cuando Dios hizo los cielos y la tierra, que todo era perfecto, Dios había planeado dejar el sábado como un día de descanso, como conmemoración de la creación y de quien es su creador. El origen del sábado es desde la creación; es hecho por Dios y entregado a los hombres. Desde entonces, se ha mantenido siendo el día del Señor.
Q.D.L.B. HOY Y 100PRE...